El día martes 3 de marzo del presente año, en un espacio cargado de historia (la Capilla San Antonio Abad del Monasterio de las Nazarenas), en la ciudad de Cusco, Perú, se realizó la presentación de este thriller andino. Invitados por el hotel Belmond - Monasterio y su gestora cultural, Laura Bracamonte, se dieron cita Onelia Cardettini, Jorge Cabrera y Bartolomé Leal, para devolver al espacio cusqueño, a su cultura e historia, este relato que es, de algún modo, una invitación a conocerlo.
Dejamos acá el registro audiovisual de este emotivo momento.
martes, 31 de marzo de 2015
miércoles, 26 de junio de 2013
martes, 4 de junio de 2013
‘Periférica Blvd.’, novela barroca y paródica. Por Verónica Ormachea Gutiérrez
La autora ingresó a la Academia Boliviana de la Lengua con un discurso sobre la obra de Adolfo Cárdenas. Estos son algunos fragmentos.
Historieta • Cuadros del cómic ‘Periférica Blvd.’, adaptación y dibujos de Susana Villegas y Álvaro Ruilova, y color de Óscar Zalles. La obra, que cuenta con el apoyo del Espacio Simón I. Patiño, se publicará próximamente.
James Joyce, el escritor irlandés que rompió con toda la tradición literaria occidental hasta principios del siglo XX al imponer un nuevo canon estético renovando la literatura moderna, afirmó que su obra Finnegans Wake sería tan compleja que críticos literarios y escritores se pasarían 30 años o incluso muchos decenios más estudiándola. Y así ha sido. Aquello no sólo ha ocurrido con dicha obra sino también con sus demás cuentos y novelas. Han pasado poco menos de 100 años y éstos siguen siendo objeto de análisis.
Algo parecido ocurre con el escritor boliviano Adolfo Cárdenas. Nos ha condenado de la misma manera que Joyce. Han transcurrido casi diez años de la publicación de su novela Periférica Blvd. y ésta sigue siendo estudiada no sólo por la dificultad de su comprensión, sino por lo que hay debajo de esta complejidad que, por supuesto, como suele ocurrir con los buenos libros, no es accidental. Propuesta. Periférica Blvd. de Adolfo Cárdenas Franco es el resultado, in extenso, del cuento Chojcho con audio de rock pesado —publicado en 1992— que sitúa al autor como uno de los más creativos e innovadores cuentistas bolivianos contemporáneos.
Publicada por la Editorial Gente Común, Periférica Blvd. es una obra que se enmarca dentro del género policial urbano, el relato negro, la novela de corte realista, el permanente experimento estilístico, el barroco latinoamericano y, sobre todo, la parodia. El autor nos muestra con la maestría del que sabe el submundo dramático y sórdido que pervive en los barrios situados en los márgenes de las ciudades de La Paz y El Alto, destacando ciertas avenidas o lugares o barrios, como la avenida Periférica, que además da su nombre a la novela, o el barrio alteño 16 de julio. Siempre recodos populares.
Periférica Blvd. es una interesante propuesta contemporánea con base en el barroco americano ya antes trabajado por autores como José Lezama Lima, Alejo Carpentier o Carlos Fuentes. El escritor la ha subtitulado Ópera Rock-ocó, hecho que, desde el principio, nos da un guiño que habrá de estar presente a lo largo de toda la lectura; el rococó, también conocido con el nombre de barroco tardío, significa, en el fondo, el horror al vacío, el horror permanentemente adornado de un grotesco vertiginoso. Este subtítulo muestra en principio la originalidad del texto que se traduce en un juego de palabras poco común en la solemne narrativa boliviana, en este caso el cruce de dos idiomas, el español y el inglés, nos deja conocer que, además de rococó, la otra intención del libro es abiertamente musical, con una innegable tendencia rockera, música popular.SUBMUNDO. Si bien otros escritores bolivianos como Jaime Saenz, René Bascopé y Víctor Hugo Viscarra han escrito sobre el submundo paceño, ése que late debajo de la ciudad y sobre todo cuando la luz solar se ha marchado, incursionando sutilmente en el ámbito psicológico de los personajes y planteando la curiosa sociología de un mundillo sórdido y caótico muy complejo, Adolfo Cárdenas presenta este mismo mundo marginal desde una óptica distinta —quizás incluso más íntima— gracias a los recursos que utiliza del grotesco.
Uno de los grandes valores de Periférica Blvd. es la escritura del lenguaje verbal del mestizo citadino y del aymara campesino radicado en la urbe que traduce a la narrativa, lo que, por ejemplo, no consigue Saenz en su famosa novela Felipe Delgado. Cárdenas utiliza la fonética, la hace suya, la dota de una sintaxis inédita y la traduce en letras. Difícil tarea.
Esta es una obra de extraordinaria originalidad, creatividad, humor, dueña de un terrible sarcasmo y es un experimento de innovación lingüística muy bien logrado. Periférica Blvd. irrumpe con la fuerza de una novedad sólida en el panorama literario nacional.
La novela versa sobre la persecución de dos policías: el teniente Villalobos o El Lobo y Severo Fernández, el chofer de una patrulla en la que buscan a Maik, el testigo de un crimen. El Rey, un graffitero, ha sido asesinado en una fiesta rockera de marginados. Durante toda una noche hasta el amanecer, atraviesan aquel submundo de clubs nocturnos, bares, prostíbulos, desde Villa Fátima a la Ceja, invadiendo el corazón de los barrios periféricos de donde salen personajes y situaciones tan insólitos como profundamente grotescos, jocosos y miserables.
Todos los personajes que peregrinan las páginas de Periférica Blvd. son antihéroes. Algunos luchan por escapar del anonimato al que están condenados, otros poseen ciertas pretensiones de elevar su condición social, los más desean permanecer tal como están perpetuando así el modelo de la sociedad estamental.
La única grandeza que tienen estos antihéroes es el haber nacido, ya que viven en un entorno social desfavorecido del que serán incapaces de poder huir. Por tanto buscan dinero para sobrevivir la vida de cualquier manera. La delincuencia, el tráfico de drogas, la prostitución, la corrupción, etc. Periférica Blvd. también explora a través de sus personajes, las diversas formas de asumir una propia sexualidad marginal, es un mosaico de colores extravagantes y refulgentes: desde prostitutas hasta homosexuales, desde lesbianas hasta travestis, siempre inmersos en el mundo de la bebida y de las drogas.
Se puede confirmar, entonces, que Cárdenas rompe, con Periférica Blvd., todos los esquemas de la literatura clásica boliviana, y se presenta como un vanguardista en el campo de la novelística local, un innovador de grandes proporciones en el medio literario boliviano. Periférica Blvd. es una novela perteneciente a la escuela del sarcasmo, esa que parodia la condición humana y la caricaturiza. En la descripción de aquel submundo desconocido para muchos que existe algo más allá del simple reto lingüístico y el hecho de lo grotesco. Hay una nueva visión de mundo.
Cárdenas, como ya hizo en sus anteriores libros de cuentos, Fastos marginales y El octavo sello, indaga, dada su percepción estética, en las situaciones del hombre de la calle, del que pertenece al lumpen y lo hace hablando en su propio lenguaje, reinventándolo inclusive. Esto, a diferencia del romanticismo, donde los héroes son los actores principales y la narración alimenta la razón de vida del héroe épico, muestra una clara intención de escapar de lo convencional. Cárdenas ahonda en conmocionantes realidades sociales. Explora en la herida de situaciones inevitables. HUMOR. En Periférica Blvd., el autor presenta con humor la trágica realidad de la voz de los silenciados, los despreciados, los desplazados, lo que nos da una gran oportunidad de conocer —y discutir gracias al mismo humor que se encarga de dotar de ambigüedad al texto— en profundidad y de otra manera, quizás más colorida e histriónica, un tema muchas veces tocado en nuestro medio, desde Raza de bronce hasta Felipe Delgado. De esta manera podemos observar cómo la historia y los movimientos sociales se generan desde el interior, desde el proletariado, desde el lumpen, desde la miseria de la gente sin destino y sin posibilidades de redención alguna por parte de la sociedad que los circunda.
Cárdenas también incursiona en la presentación visual a través del recurso del graffiti, recuadros con avisos comerciales que llevan un mensaje o una comunicación policial en clave, otros recursos describen un escenario o a un personaje, caricaturas, partituras musicales, todo bajo la sombra del inefable carácter humorístico y mordaz de Periférica Blvd. Podríamos decir, entonces, que, en este aspecto, Adolfo Cárdenas es un innovador.
El autor se vale de varias citas, a manera de epígrafes, para preceder a cada uno de los capítulos y, gracias a ello, caemos en cuenta de lo que en verdad significa la parodia: una burla y un homenaje al mismo tiempo. Nada más ambiguo.
Sin duda, la narrativa de Cárdenas está hermanada con el mundo saenziano, que es el precursor del grotesco urbano en Bolivia. La más destacada novela de Saenz, Felipe Delgado (que probablemente es un alter ego añejo de Periférica Blvd.), cuyo personaje principal está inmerso en el mundo del alcohol, busca su identidad y el sentido no sólo de su propia vida sino de la existencia humana. La obra de Saenz, sin embargo, se enmarca en el mundo social del conventillo —esas casonas antiguas con decenas de cuartuchos donde viven, todos juntos, familias enteras o personas solitarias—. En ellas habitan desde aristócratas venidos a menos por su mala situación económica hasta alcohólicos, prostitutas e indígenas que inmigran del campo. Sus escenarios se caracterizan por presentar una enorme mezcla social y sus personajes son conflictivos.
René Bascopé, en su novela La tumba infecunda, demuestra que es uno de los mejores herederos de Saenz, también enmarca como escenario principal al conventillo.GROTESCO. Si bien dichos autores se encuadran dentro del grotesco urbano, Adolfo Cárdenas, a diferencia de ellos, no utiliza como escenario un mundo simbolizado en el conventillo sino que el entorno en que ubica a sus personajes es más amplio: la periferia de la ciudad de La Paz. Cárdenas es, sin duda, un heredero de la tradición inaugurada por Saenz ya que abarca ese mismo mundo de los marginados. No así, sin embargo, en el ejercicio narrativo ni en el lingüístico, ya que Cárdenas impone un nuevo canon que se podría denominar el “aymarañol”.
Cárdenas, en Periférica Blvd. propone un diálogo con otras obras pertenecientes a su “misma familia”. Por ejemplo, usa el recurso de la metaficción cuando muestra al personaje de la novela homónima, Felipe Delgado, ingresando a un bar y ordenando una copa. O cuando coloca el nombre de “Sastrería Borda” a un taller de costura porque la leyenda dice que el célebre escritor y pintor Arturo Borda falleció en una al beber alcohol puro.
Periférica Blvd. es a La Paz lo que Ulises, de Joyce, es a Dublín, incluso en el tratamiento de los recursos narrativos. Se nota una poderosa influencia del escritor irlandés, tanto en el distinto orden y estilo de los capítulos como en la duración de la novela. A su manera, Periférica Blvd. también funciona como una parodia de Ulises.
Temporalmente hablando, Ulises es una novela que se desarrolla en 24 horas en la ciudad de Dublín. Periférica Blvd. es una novela que se desenvuelve en una noche en la ciudad de La Paz, en el espacio de diez horas.
Adolfo Cárdenas literaturiza la oralidad del lenguaje cotidiano a través de la jerga que utiliza del mundo marginal. Esta literaturización traduce el lenguaje oral tosco y vulgar del lumpen con destreza, creatividad y humor. Todos los melodramas —en el fondo tragicomedias— de las laderas llenan el contexto general de la novela.
A través del lenguaje, los personajes se describen solos. A través de éste se puede apreciar el estrato social de los personajes que el lector paceño podrá reconocer de inmediato.
Algo parecido ocurre en el libro de Víctor Hugo Viscarra que titula Borracho estaba pero me acuerdo (2002): se sumerge en el bajo mundo del alcoholismo y utiliza la coba entremezclada con el aymara. La diferencia es que Viscarra escribe en el lenguaje con una sola voz. Periférica Blvd. es una novela polifónica.
INFLUENCIA. En torno al lenguaje, probablemente Cárdenas está muy influenciado por los escritores ingleses del grupo Jóvenes Iracundos: Anthony Burguess, autor de La naranja mecánica, y Alan Sillitoe, autor de La soledad del corredor de fondo, e incluso por el estadounidense John Kennedy Toole, autor de La conjura de los necios.
Interpretar —y más, escribir— cómo se expresa un aymara analfabeto que ha aprendido lo poco que sabe de español de oídas no es fácil. Su conocimiento le llega a través de la información oral y los medios gráficos. Un claro ejemplo es el habla de Severo, un ciudadano de la clase baja. Su forma de hablar y de ser transcrita por el autor es tan auténtica que por momentos la lectura resulta ininteligible. Por ejemplo: “Sorden, me tininti” en lugar de: “A su orden mi teniente”. Con este tono de fondo, se desarrolla la mayor parte de la novela.
Lo mismo ocurre con la jerga que utilizan los delincuentes, los drogadictos, los policías, las prostitutas, los narcotraficantes, los travestis que habitan aquel submundo. Es un lenguaje agresivo, crudo, trasgresor que incluso copia, de forma oral, ciertas palabras inglesas. El lenguaje de la novela está cargado de juegos fonéticos intraducibles así como culturismos particulares y vulgarismos.
Ciertos modismos y palabras no sólo son utilizados por los del mundo del hampa, sino por todos los estratos sociales. La pregunta final es: ¿quién copió a quién?
Si bien esto demuestra una vez más y la originalidad de Cárdenas, dificulta aún más su lectura. Quizás la mejor manera de comprender la novela, dadas sus propiedades orales, es leyéndola en voz alta.
Adolfo Cárdenas se presenta también como innovador en la forma de escribir y su imaginación se encarga de crear un nuevo lenguaje escrito.
lunes, 8 de abril de 2013
Un thriller andino (a la chilena): "En el Cusco el Rey" de Bartolomé Leal
El autor de esta novela tiene una reconocida carrera como escritor de novela negra fuera de Chile. Sin embargo, no es muy conocido en nuestro país, más allá de ciertos círculos. Publicar este título en Chile, por una editorial chilena, busca sellar en cierto modo esa deuda y, más aún, con la que él considera su obra favorita.
SINOPSIS • Un profesor de arte limeño, con una historia de vida digna del Lazarillo de Tormes, es convocado por la orden franciscana a la ciudad del Cusco, para que los ayude a solucionar un problema de falsificaciones y de posibles robos de piezas de arte colonial. Esto lo pondrá en curso de colisión con una mafia internacional de contrabandistas de arte. Pero, gracias a su astucia y viveza, logra desembrollar una trama de relaciones, personajes y situaciones ocultos en la dinámica de la vida social cusqueña. Así, y en compañía de dos frailes jóvenes dispuestos a todo, recorre la sierra y el altiplano de Perú y Bolivia hasta lograr recuperar las obras, no sin algunos golpes de audacia y persecuciones propias del cine de acción. Son sumamente interesantes y sabrosas las disquisiciones estéticas de este personaje y la serie de antecedentes, digamos pedagógicos, con que el autor-narrador presenta la trama. En resumen, una novela entretenidísima, bien contada y que no deja de ser una invitación abierta para recorrer los fascinantes parajes y lugares descritos, y así comprender más sobre el medio en que se desenvuelve esta historia, construida en todo caso con datos y locaciones reales (es la novela que todo viajero a Perú debería llevar).
Bartolomé Leal • (Santiago de Chile, 1946). Escritor chileno de novela policial y negra. Ha ejercido la crítica de cine, cerveza, narrativa de ficción, relatos de viajes, arte africano y arte precolombino. En «La Ramona», suplemento cultural del diario Opinión de Cochabamba, ha escrito más de un centenar de textos en sus columnas «Cuentos & Cuentistas» y «Memorialistas & Viajeros». También es colaborador del blog literario Ecdótica, donde anima la columna «El Cuento del Mes». De allí salió su libro Cuentos para un año (Cochabamba, 2012). Ha publicado los libros Linchamiento de negro (novela, Santiago, 1994; traducida al inglés), Morir en La Paz (novela, Barcelona, 2003; Cochabamba, 2012; traducida al alemán), En el Cusco el Rey (novela, Cochabamba, 2007), El caso del rinoceronte deprimido (novela corta, Cochabamba, 2009), Pequeñas muertes negras (cuentos, Santiago, 2009), Muerte de un escritor (novela corta, Mandrágora Cartonera, Cochabamba, 2010), y Memorias de un asesino en serie (folletín, Cochabamba, 2012).
Cuentos suyos están incluidos en las antologías del relato policial chileno Crímenes Criollos (Mosquito, 1994) y Letras Rojas (Lom, 2009), en selección de Ramón Díaz Eterovic. Tiene en preparación el libro Historias del muñeco vudú, relatos basados en sus experiencias en Haití.
Lea un avance de la novela:
domingo, 7 de abril de 2013
Periférica Boulevard: La exitosa novela boliviana ya está disponible en Chile
Desde su aparición, en el 2004, esta novela ha causado gran impacto en la literatura boliviana tanto por su temática como por la estética rupturista de su narración. Pero, además, se convirtió en un suceso editorial. Según indica Gente Común, la editorial que se atrevió con la primera edición de este título, se han vendido más de 3 mil ejemplares y próximamente estará disponible su edición en tapa dura y en cómic. También hay rumores de secuelas, precuelas y adaptaciones al cine y como serie de TV.
Periférica Boulevard
de Adolfo Cárdenas Franco (boliviano)
Colección Narrativa Latinoamericana Contemporánea
978-956-9213-00-7 • 140 x 216 mm • 276 páginas
Adolfo Cárdenas Franco • (La Paz, 1950). Novelista y cuentista boliviano. Realizó sus estudios superiores en Patterson School of Fine Arts de Nueva Jersey, y de literatura en la Universidad Mayor de San Andrés, Bolivia, y en la Universidad de Iowa, Estados Unidos.
Es autor de las colecciones de cuentos: Fastos marginales (1989), Chojcho con audio de rock p’ssahdo (1992), El octavo sello (1997), Doce monedas para El Barquero (2007) y Tres biografías para el olvido (2008); y autor, además, de las novelas: Periférica Boulevard (2004) y El caso del Pérez de Holguín (2011).
Vea una entrevista al autor realizada por el colectivo TRIBUANDINA:
Lea "Drag Queen" un capítulo de avance:
Periférica Boulevard
de Adolfo Cárdenas Franco (boliviano)
Colección Narrativa Latinoamericana Contemporánea
978-956-9213-00-7 • 140 x 216 mm • 276 páginas
SINOPSIS • Un asesinato es cometido en las narices mismas de una pareja de policías bolivianos que han concurrido al Polifuncional (una especie de gimnasio municipal), construido en la zona conocida como La Ceja de El Alto, límite entre el altiplano y la hoyada en que se encuentra emplazada La Paz, sede de gobierno boliviano. El occiso: EL REY, gurú del underground paceño-aimara, grafitero y globalizado rockero. El asesino, según indican algunos rayados, sería su archirrival: EL LOBO. Pero nadie conoce a El Lobo. Nadie, excepto un testigo ocular del crimen y que, por lo mismo, debe huir por toda la ciudad mientras es perseguido por esta pareja extravagante de policías, con ellos asistiremos a los lugares más sórdidos de la noche paceña por donde se nos muestra un friso delirante de personajes de toda laya y condición. Un recorrido periférico y nocturno que es una imagen profunda de la Bolivia contemporánea.
Escrita como una narración polifónica y carnavalesca, en esta novela difícil, el lector tendrá que desenrollar el lenguaje híbrido con la que está escrita y entrar al torrente imaginativo de Adolfo Cárdenas, a estas alturas un autor de culto para los jóvenes artistas y escritores bolivianos.
Periférica Boulevard obtuvo Mención de Honor del Premio Nacional de Novela de Bolivia el año 2003 y desde su publicación, en el año 2004, ha tenido sucesivas reediciones, convirtiéndose hoy no sólo en un éxito editorial, sino también en un hito para la narrativa boliviana y para su cultura pop. Prueba de ello es que en el año 2011 su primer capítulo («Chojcho con audio de rock pesado») es llevado a los escenarios bajo la forma de una ópera rock con gran éxito de taquilla. Además se ha anunciado su pronta aparición como novela gráfica, junto con de su adaptación al cine y al formato de serie de TV.
Adolfo Cárdenas Franco • (La Paz, 1950). Novelista y cuentista boliviano. Realizó sus estudios superiores en Patterson School of Fine Arts de Nueva Jersey, y de literatura en la Universidad Mayor de San Andrés, Bolivia, y en la Universidad de Iowa, Estados Unidos.
Es autor de las colecciones de cuentos: Fastos marginales (1989), Chojcho con audio de rock p’ssahdo (1992), El octavo sello (1997), Doce monedas para El Barquero (2007) y Tres biografías para el olvido (2008); y autor, además, de las novelas: Periférica Boulevard (2004) y El caso del Pérez de Holguín (2011).
Vea una entrevista al autor realizada por el colectivo TRIBUANDINA:
Lea "Drag Queen" un capítulo de avance:
Suscribirse a:
Entradas (Atom)